La corona del Cortex también es impresionante, ya que el diseño presenta un material compuesto de fibra de carbono que utilizan muchas marcas. Una ayuda de alineación mínima es útil para cuadrar el driver con la pelota en la dirección, y la forma general de la cabeza parece profunda y aumenta la confianza.

En términos de sensación, el Cortex es uno de los mejores drivers de sensación que he golpeado. El sonido es nítido pero sólido en el impacto, lo que me encanta. La varilla blanca de la culata Atmos se ve fantástica contra la cabeza del palo más oscura, y el peso total del palo se siente liviano sin sentirse endeble. El Cortex es un controlador que se siente como si pudieras arrancar el infierno de tu viaje.

Rendimiento

El Cortex me sorprendió en términos de distancia y control. Seré honesto: nunca me he golpeado tan bien con los conductores de Wilson Staff, especialmente en comparación con mi jugador. El Cortex no solo era fácil de controlar en términos de precisión, sino que los números de distancia, lanzamiento y giro también eran impresionantes.

Si bien mi club de demostración presentaba la varilla Atmos Red (lanzamiento alto, efecto alto), que probablemente no sea ideal para mis tendencias de swing, los datos del monitor de lanzamiento de pelota seguían siendo sólidos. La velocidad de la pelota promedió 150 mph en mi sesión de prueba, que es un poco más baja que la de mi jugador, pero aún así se puede jugar. El lanzamiento fue un poco más alto de lo que necesitaba gracias al eje antes mencionado (19 grados en promedio), el giro rondó las 2700 rpm en mi muestra que controló cualquier globo.

Promedié aproximadamente 265 yardas en el monitor de lanzamiento con el Cortex, que es un poco más corto que mi jugador, pero no por mucho. Al final del día, podría jugar fácilmente con el Cortex y no perder el ritmo con mis tendencias de juego.

Impresión final

No tengo ninguna duda de que el Wilson Staff Cortex es el mejor driver que la marca ha fabricado en mucho, mucho tiempo… posiblemente nunca. Tampoco hay duda de que la tecnología y el diseño justifican el precio de $ 499, especialmente porque el Cortex se mantiene firme frente a los competidores de su clase.

Para mí, si estuviera buscando cambiar al Cortex a tiempo completo, basaría esa decisión en su increíble sensación, sonido y precisión. Si está jugando con un controlador que tiene algunos años y está dispuesto a darle una oportunidad a Wilson, tenga la seguridad de que experimentará los mismos beneficios de la tecnología moderna en el Cortex que lo haría con cualquier otra marca. Con un ajuste adecuado, apostaría a que el Cortex podría superar a muchos de sus competidores.